El debate político organizado por el Instituto Estatal Electoral de Sinaloa ofrece una vitrina transparente para la postura de cada candidato y de sus partidos políticos.
Este nuevo ejercicio democrático ofrecido por la autoridad electoral en el estado de Sinaloa, se le ofreció al ciudadano la oportunidad de conocer quizá por única ocasión las caras de quienes buscan representarnos.
Los candidatos participantes fueron Luis Arturo Pimbert del partido PES; Arely Flores del Movimiento Ciudadano; Tony Quiñónez de la coalición PAN, PRI, PRD, PAS; Martha Dagnino de la candidatura común Morena-partido Verde.
En su gran mayoría para no generalizar, existen muchos candidatos de papel, sin voluntad propia donde su participación se basa en leer la docena de panfletos escritos por un cerebro tras bambalinas, pero que reflejan la mentalidad o la incapacidad de un candidato para debatir.
Con el debate político donde sobran las buenas intenciones, muchos ciudadanos despejan sus dudas e inclusive, para algunos son herramientas democráticas que ayudan para razonar o cambiar la intención del voto.
En un plano general, el IEES no debería permitir la participación de los candidatos de papel, deberían de obligar a un verdadero debate, de confrontación de ideas y propuestas.
El público está cansado de ver y escuchar candidatos voceros de sus asesores o partidos, son lectores huecos, sin corazón y sin sentimientos que llegan a transcribir pero de manera vocal un documento previamente hecho a la medida de sus propios intereses políticos, quizá deberían pensar en cambiarle el nombre a concurso de oratoria y no llamarle debate político de candidatos, porque lo que menos existe es la confrontación de ideas y propuestas.
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