Aún cuando las propias autoridades de la Dirección de Movilidad Sustentable y diversos grupos vulnerables, le piden a la sociedad respeto a los espacios designados o asignados para personas especiales, la Dirección de Vía Pública tira todo el trabajo de concientización por la borda al otorgar permisos a diestra y siniestra y al mejor postor sin importar que obstruyan accesos y rampas pintadas de azul.
Alma Yadira Morales Espinoza, la directora de vía pública y espectáculos del ayuntamiento de Guasave, solo ha servido de recaudadora de cobros por piso, no le importa el orden, pues pareciera que su función es llevar dinero a las arcas municipales a costa de todo.
La funcionaria que se dedica la mayor parte de su tiempo laboral en sus actividades personales y familiares, no ha sabido responder a sus labores quedándole mal al presidente municipal Martín Ahumada Quintero.
Vía pública no mira, no inspecciona y hasta de la vista gorda se hace a conveniencia, pues es tan visible como muchos comercios están acaparando las banquetas con bardas y bancas ancladas obstruyendo el libre tránsito peatonal.
Lamentablemente Morales Espinoza tiene todo el poder desde el ayuntamiento, pues de otra manera, no se entendería como es que trae tremendo desorden en la entrega y cobro de permisos para vender en la vía pública, no solamente en el primer cuadro de la ciudad, sino en cada punto o evento donde existan vendedores y ella tenga que repartir los espacios, cobrando a su libre albedrío y llevando a tesorería lo que considere pertinente.
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